El mundo cambia, eso es una obviedad. Pero, de un tiempo a esta parte estamos viendo signos que indican que podríamos estar ante lo que luego los historiadores llamarán cambio de era o de ciclo.
Desde hace tiempo China, ha hecho oir su voz pidiendo más peso en la economía mundial y apuntando que el dólar puede no ser ya la moneda de referencia. En algunos casos se apuntaba a una cesta de monedas y en otros, directamente se ofrecían candidatos (adivinen cuáles). Ahora no son los chinos quienes se ofrecen, sino que es el Presidente del Banco Mundial quien afirma que a corto plazo habrá más divisas capaces de desbancar al dólar. Y, según él, los más firmes candidatos son el yuan y el Euro.
Es claro que el mundo tiene ahora más vértices y matices y que el poder ya no sólo está en Norteamérica. China e India superan ya el 8,5% de la producción mundial (de las cuotas de pobñación, ni hablemos) y crecen a un ritmo más elevado que el resto de países. La incógnita es si este crecimiento (determinado en buena parte por la demanda interna) se podrá mantener cuando se retire el plan de estímulo chino que ha supuesto más de 586.000M$.
El reconocimiento del papel de los países emergentes se produjo también en la reciente cumbre del G-20 en Pittsburgh donde los líderes del mundo acordaron transferir a los países en vías de desarrollo más poder en el FMI (al menos 5% adicional) y el Banco Mundial (al menos 3% adicional). Claro que, antes habían proclamado que el G-20 se configura como el primer foro para la cooperación económica internacional, lo cual puede hacer parecer menos fuerte el traspaso de poder mencionado. Aunque... no es así, pues del G-7 o G-8 hemos pasado al G-20. Lo cual... abre una nueva incógnita ¿cómo será el reparto de poder entre estas tres instituciones: FMI, Banco Mundial y G-20?
Y al hambre, se unen las ganas de comer. China está dando muestras de que quiere asumir un rol mayor en la economía mundial y da cada vez más señales de apertura. Se ha producido una emisión de deuda de más de 6.000M de yuanes y se están admitiendo a cotización en la Bolsa de Shanghai (no sólo en Hong Kong) empresas extranjeras .
No sé por qué me da que pronto cambiaremos los mapas mundi: de ocupar el centro el Océano Atlántico, tal vez pase a ocuparlo (como ya hacen en muchos países de Asia) el Océano Pacífico.
Ah, y también en casa se mueven las cosas. Es significativaoel relevo en la cúpula del BBVA del Consejero Delegado más veterano de la banca española!
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