Han venido a mis manos estos días varios informes en los que se resalta la importancia creciente de las mujeres en la toma de decisiones en muchos órdenes de la vida. Inciden sobre todo en la capacidad creciente que tienen de adoptar decisiones de compra y de tomar decisiones.
Las estadísticas avalan estas conclusiones: en 2009 por primera vez tendrán más de la mitad de los trabajos en EE.UU. y el 57% de las licenciaturas universitarias y el 60% de los masters.
Y... me pregunto yo. Creciendo como crece la formación y el talento de las mujeres ¿cómo es que aún nos encontramos esos techos de cristal y no logran acceder a las cúpulas de decisión? ¿podemos permitirnos el lujo de desperdiciar tantos esfuerzos individuales y colectivos?
Link
No hay comentarios:
Publicar un comentario