Seguro que alguno de ustedes ha experimentado una situación similar a la que les describo. Un miembro de la familia toma una decisión, por así decirlo, poco convencional. Algunos de los miembros de la familia se asustan y más pensando en cómo "decírselo al abuelo" "con lo tradicional que es él" . Y... cuando se lo dicen al abuelo, reacciona con una comprensión inimaginable y de la que ya podrían hacer gala algunos de los miembros más jóvenes de la familia. ¿Les suena la escena? ¿les ha admirado en alguna ocasión?
Pues resulta que esta escena debería ser más familiar y común de lo que la gente cree. Un estudio de la Universidad de California en Berkeley (EE.UU.) ha revelado que las personas mayores tienen más inteligencia emocional. Tienen mayor capacidad que los más jóvenes para verle el lado positivo a las situaciones más complicadas. Y... además de empatizar con los menos afortunados. Según el estudio, además, la inteligencia emocional (esa capacidad para reconocer sentimientos propios y ajenos y... manejarlos) y las habilidades cognitivas pueden agudizarse a partir de los 60 años. Parece que, cuando envejecemos no todo es malo. Parece que el sistema nervioso va aprendiendo y mejora en las actividades interpersonales y compasivas.
Si quieren más detalles pueden pinchar en el enlace adjunto
Les diré que me sorprendieron los resultados del estudio. Parece que no todo es malo a medida que envejecemos. Algunas cosas mejoran! Pero también les confersaré que no me chocaron. Por lo general, siempre me he encontrado con ancianos comprensivos, que escuchan, que dan ánimos y que buscan el lado positivo cuando se les cuenta una situación complicada o difícil.
Ya saben, una razón más para alegrarnos cuando cumplimos años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario