Cuando veo las noticias en el telediario, me da la impresión de que no corresponden a mi país sino a uno remoto y lejano. Incendios, incendios y más incendios, un calor achicharrante que recorre España entera, olas de calor.... En mi querida Galicia no sucede nada de eso. Hace fresco (por no decir frío), llueve a cántaros y las playas son una bonita postal de la que los ciudadanos, a causa del tiempo, hacemos un uso limitado. Paradojas de la metereología contra las que no podemos luchar.
No obstante, existen otras paradojas en las que sí que tenemos algo que hacer. Dondequiera que voy me encuentro calles cortadas, peligrosos senderos para peatones en el medio de la calzada, zanjas y otros muchos estorbos de la vida urbana. Es el plan E que me acompaña en todas las ciudades que recorro. Hasta la fecha, al menos para mí, lo más destacado del plan E es que se dedican a levantar y volver a poner aceras. No tengo nada en contra de las humildes aceras, pero, creo que nadie aprecia la mayor belleza de los diseños con los que nos está obsequiando (con nuestro dinero, no lo olvidemos) el gobierno. La explicación, según un amigo mío que entiende del tema, es que necesitan mitigar la sangría del paro y realizar proyectos intensivos en mano de obra.
En esto, vuelvo al telediario. Explican los entendidos que la virulencia de los incendios es enorme porque existe mucha maleza sin limpiar acumulada en el monte. Cierto es que los incendios se apagan en el invierno limpiando maleza, rastrojos y demás. Y me pregunto yo ¿no son estas actividades intensivas en mano de obra? ¿no podríamos haber empleado parte de los recursos del plan E en limpiar montes y evitar el peligro, la pérdida económica, la tristeza, las muertes y desolación que dejan los incendios? Están levantando mi calle para trocar unas aceras grises en otras... también grises. Preferiría que me ahorrasen las incomodidades que conlleva y el gasto que supone y que dedicasen el esfuerzo económico que representa, a limpiar una parte de monte.
Lo que me sorprende es que esta idea no se le ocurriese a nadie del gobierno ni de la oposición. Claro que... pensándolo bien en el monte ¿quién iba a leer los carteles de Plan E.- Gobierno de España? Y a los alcaldes (incluidos los de la oposición) que han logrado arrancar al Plan E gimnasios, cambio de farolas, cambio de papeleras y demás, les iba a resultar más difícil mostrar sus logros y mejoras ante sus conciudadanos. ... ¿Será que la solución para que el monte esté limpio pasa por conceder el derecho de sufragio a las liebres, cervatillos, lobos, hurones, urogallos, perdices, zorros, ardillas, erizos, y demás animales que pueblan nuestros montes?
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