Estos días existe un debate muyabierto en todo el mundo acerca de la posible nacionalización de etidades financieras. Algunos países, como Islandia o el Reino Unido ya optaron por ello. En España nadie quiere ori hablar de tal cuestión y en EE.UU. se debaten entre nacionalizar o no nacionalizar, ésa es la cuestión.
En EE. UU. se defiende una nacionalización temporal, es decir, el Esado se queda con los bacos durante un tiempo. Tras sanarlos, los bancos volverían a manos privadas. Algo muy distinto a las nacionalizaciones manu militari que dentro de la "revolución agroalimentaria" está llevando a cabo el dictador Chavez en Venezuela.
Lo curioso en EE.UU. es que son los republicanos, por lo general otrora los más acérrimos defensores de la mínima regulación y la mayor libertad de mercado, son los más partidarios de la nacionalización. Los demócratas (tal vez porque la patata caliente de llevar a cabo el proceso les toca a ellos ahora que están en el poder) se resiten más. Precisamente para tratar de vencer esta resistencia, y dando por sentado que los bancos volverán pronto a manos privadas, algunos sugieren que se use el término "preprivatización" en lugar de nacionalización. Un eufemismo, dirán algunos. Para otros refleja la determinación clara de la nacionalización como etapa intermedia y lo más corta posible. En cualquier caso, que no sea porque el lenguaje no cuenta con capacidad para generar palabras, según se requieren!
Lo que sí parece claro es que nadie quiere dejar caer a ninguna institución financiera. Para experimentos, con Lehman Brothers ya ha llegado.
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